Carlos Tirado
Santo Domingo Chihuitan, Oaxaca.- El municipe de Chihuitan, Rubén Ordaz Torres, después de transcurrir nueve meses de su administración, al parecer no ha podido con el paquete y el traje de alcalde le quedo muy, pero muy grande, ya que nada ha hecho en la población más que hinchar su bolsa.
Tanto, que no ha podido resolver la deuda que tiene con la Comisión federal de Electricidad que corresponde a seis meses de servicio en el período de Abril a Septiembre con un monto de 592,503 pesos y todavía se resiste al corte de luz del municipio y alumbrado público.
Nuevamente Chihuitan quedará a obscuras y sin agua ya que también se suspende el servicio para la operación de las bombas de agua potable.
Los empleados de comisión llegaron, comunicaron con anterioridad al munícipe y procedieron a suspender el servicio del Palacio municipal, parque, iglesia, bombas de agua, el domo y el arco en la entrada a la población.
El presidente se acercó a los empleados señalando que no iba a dejar cortar el suministro y que llamaría a la gente para impedirlo, sin embargo, la gente no salió y la que llegó, fue para respaldar a los de la CFE, señalando que el edil no ha hecho nada por el pueblo y es más, que ya es la hora en que se vaya y renuncie a la presidencia.
Posteriormente apareció la Tesorera Magdalena Rodríguez amenazando al personal de CFE de retenerlos en la población, para que no procedieran con la suspensión del Servicio.
Mientras el Edil se concretaba a contemplar todo con su mochilita al hombro rogando a Dios por un milagro.
Finalmente con el apoyo de otros integrantes del cabildo, le cerraron el paso a la camioneta de CFE con otros vehículos reteniendo al personal, mientras que el presidente y el síndico acuden a Juchitán para dialogar con el superintendente.