➡️Vecinos de las víctimas iniciaron la colecta de apoyos para gastos médicos
➡️ Se espera que ambas menores sean llevadas a hospitales especializados
Redacción El Piñero | Corresponsalía
Tuxtepec, Oaxaca.- Las hermanitas Rosario, de 14 años, y Ana Gabriela Alfaro Bravo, de nueve, junto a Doña Paulina, de 65 años, su abuelita, vivieron una nueva desgracia: el fuego de un accidental incendio enlutó y redujo a cenizas su hogar.
Poco después de las 6:00 horas de este martes- 7 de febrero- vecinos de la avenida Bonfil y la calle Mutualismo, de la colonia Hidalgo, se alertaron ante el incendio de uno de los cuartos de una vivienda.
Es por ello que, a como pudieron, iniciaron el auxilio de las personas que allí se encontraban, al mismo tiempo en que solicitaban el apoyo de las autoridades y personal de Bomberos.
Gabriela Aguayo, presidente de la colonia Miguel Hidalgo, relató a El Piñero Periodismo y Debate que cuando llegó las niñas iban saliendo de la casa con visibles quemaduras, en más de 50% de su cuerpo, pero Doña Paulina nunca salió.
Se logró establecer que Rosario, de 14 años de edad, ayudó a Ari a salir de la vivienda pero el denso humo y llamas impidieron que ayudara a su abuelita quien quedó al interior, lamentablemente, sin vida.
Sin embargo, en su acto heroico, Rosario sufrió quemaduras que la tienen al borde la muerte, por lo que doctores del hospital Regional de Tuxtepec hacen lo posible por estabilizarla, y así poder trasladarla a un hospital con más capacidad para poder salvarle su vida.
Con este hecho, Rosario, y su hermana suman una nueva tragedia a su corta vida, ellas quedaron huérfanas de madre cuando su padre mató a su progenitora a golpes; crecieron con su abuela. Rosario, en el vaivén de su corta vida, fue vendida a un hombre de Jalapa de Díaz, municipio de donde era originaria Doña Paulina, de donde escapó para volver con su abuelita.
Su hermana Ana Gabriela, quien no tenía identidad jurídica y ha vivido en una extrema pobreza gran parte de su vida, también está internada en el mismo nosocomio, con menores quemaduras pero también es reportada delicada.
Ante esta situación, y de nueva cuenta el pueblo de Tuxtepec se comenzó a unir, no sólo para los gastos funerarios de doña Paulina, sino para apoyar con los gastos que generen la atención médica de las menores, que como se sabe no tienen más familia.
Ante esta nueva desgracia, que dista del panorama del año pasado, cuando sociedad y gobierno regalaron un extraordinario día de Reyes a la familia, todos se han unido, logrando obtener gratuitamente un ataúd y terreno para darle digna sepultura a Doña Paulina que acompañó hasta el último día de su vida a sus nietas, que conocieron en ella a una madre.
Para cualquier donativo o información pueden marcar al 287 155 5189 con Gabriela Aguayo, quien coordina parte de la ayuda.
Doña Paulina, quien hoy está en los pensamientos y oraciones de todo Tuxtepec, cuidó a sus nietas y recolectaba papel y pet durante las noches para sostener a su hogar. En los últimos años había mejorado su nivel de vida gracias al apoyo social, sin embargo, fue sorprendida por esta desgracia, mientras dormía.