➡ En la comunidad de Pueblo Nuevo, cocinan a la leña, sin necesidad de utilizar gas.
Carlos Abad/El Piñero
A solo 15 minutos de la cabecera Municipal de Tuxtepec, se encuentra la Comunidad de “Pueblo Nuevo”, ampliamente conocida por su producción de plátano y los diferentes platillos que se elaboran con esta fruta; ahí conocimos a “Doña Lola”, quien junto a 6 integrantes más de su familia ¡Todas mujeres! Comenzaron hace 14 años el sueño de auto-emplearse para desarrollar su propia empresa que se dedica a la elaboración de platanitos artesanales tipo botana pero cocinados a la leña sin la necesidad de utilizar gas; dicha empresa se amplió hace 5 años, aunque apenas hace unos días, tras la visita del “Piñero, periodismo y debate”, decidieron bautizarla como “Bana Crunch”.
Al principio freían en hornos elaborados por ellas mismas con puros ladrillos; pero ahora pasaron de realizar manualmente 150 bolsas a la semana a 500 o mil piezas diarias de lunes a sábado, dependiendo los pedidos con una misión de que el producto Bana Crunch sea 100% saludable.
Dolores Jiménez nos recibió en el patio de su casa, que a la vez ahí se conforma su empresa, ella nos explicó todo el proceso de la elaboración de los famosos platanitos artesanales, mismos que se cocinan a la leña, aunque la primera parte del proceso es la selección y la pelada de los plátanos “Como vez aquí es nuestra área donde se pone el plátano verde, para posteriormente se pela, en el caso es la señorita Lupe es la que se encarga de pelar los plátanos, de ahí se lleva a donde se van a freír a donde nosotras estamos rebanando, aquí está todo el plátano que procesamos y el que se pone a madurar” detalló Doña Lola.
Lupe llega a las 6 de la mañana y pela la impresionante cantidad de mil plátanos al día, en promedio de lunes a sábado “llego antes que las freidoras, para que cuando ellas lleguen ya allá producto para freír, yo pelo mil plátanos al día porque el cubo se llena como 100 plátanos” explicó.
Posteriormente cada uno de los mil plátanos pelados deben pasar a la rebanadora, labor que precisamente le corresponde a Doña Lola “esto es manual, por eso se dice que este es un producto artesanal porque está hecho a mano, si usted observa en otras micro empresas tienen gas, pero algo que se distingue de nuestro producto es que artesanal elaborado a la leña”.
Luego los plátanos ya rebanados deben meterse a freír a la leña, y es aquí precisamente donde el proceso comienza a tomar sabor literalmente “aquí como ve estamos friendo el plátano verde-salado, se le echa la sal, nosotros utilizamos la sal de mar porque es algo que nos distingue y el proceso de freír dura de 20 a 25 minutos, ya de aquí se deja un espacio y se pone a secar en unas coladeras, después de lleva al área de embolsar”.
En el área de embolsar participan 3 mujeres, entre ellas Becky la hija de Doña Lola, todas deben ingresar la misma cantidad de producto y una bolsita de salsa, misma que después deben pesar “aquí es nuestra área donde se embolsa el plátano, si usted observa están nuestras mesas, ahí se ponen a embolsar las señoras y esa la báscula con que se pesa, cada bolsa debe pesar 135 gramos”.
Finalmente cada una de las mil bolsas deben sellarse minuciosamente, pero antes pasan por el último proceso de calidad “aquí la joven se trae las bolsas para sellarlas y ella va fijándose que cada bolsa no debe algún detallito, o que no algún platanito no esté grasoso, que todas las bolsas lleven salsa, acomodar bien el plátano, que todo vaya bien”.
En todo este proceso participan 7 mujeres: Guadalupe Morales Jiménez que es la PELADORA y primer filtro, Dolores Jiménez “Doña Lola” y Celia Silvestre Prieto son CORTADORAS Y FREIDORAS, mientras que Angela Jorge Martínez, Sabina Moscoso Virgen y Rebeca Valencia Jiménez “EMBOLSAN”, y finalmente María Teresa Díaz Chavala es la selladora de BANA CRUNCH.
Actualmente varias personas de distintas partes del país o visitantes del extranjero, vienen exclusivamente a “Pueblo Nuevo” para encargar a “Doña Lola” cierta cantidad de producción para enviar como recuerdo a sus familiares que viven en otros puntos de México Estados Unidos, incluso una tienda de conveniencia de corte nacional, ya les compra platanitos salados, enchilados y maduros; y hoy podemos decir que estas 7 mujeres son orgullosamente Tuxtepecanas.