¿SABES QUIEN ES EL ESCULTOR?
Durante la administración de Alfredo Ahuja Pérez, el 5 de diciembre de 1998 se inauguró la glorieta “flor de piña” como parte de la remodelación del boulevard “Benito Juárez”, desde el entronque con la avenida 5 de mayo hasta el Puente Tuxtepec.
Dicha inversión fue de 5 millones 540 mil 710 pesos con recursos de CAPUFE y del Ayuntamiento.
La glorieta es un eje articulador de las zonas centro, poniente y sur de Tuxtepec, representa el principal corredor urbano de la Ciudad.
Con la remodelación también vino la ampliación a 4 carriles de ese boulevard “Benito Juárez”.
Alfredo Ahuja sostuvo “Pero me parece que siendo un hito urbano, un referente, cambiarlo sería demoler un referente, todo mundo dice hoy por hoy, ahí donde es FLOR DE PIÑA y no hay necesidad de decir GLORIETA, es una escultura, sino con decir FLOR DE PIÑA ya sabemos delo que estamos hablando, porqué es un punto de referencia de Tuxtepec, prácticamente como si fuera un centro de Tuxtepec de donde parten vías hacía el poniente, occidente, sur y norte de la ciudad, es un HITO y ese referente, en mi opinión debería ser conservado, pero si se conserva se debe recuperar como obra artística el bronce, ya que se modificó sin autorización incluso del escultor tapatío y es de bronce, no es de yeso ni de otro material”.
En ese entonces el propio Alfredo Ahuja tras ver fotos de distintas muchachas que habían asistido a la Guelaguetza de 1998, decidió que una estudiante de la Licenciatura en contaduría del Instituto Tecnológico de Tuxtepec fuera la imagen de tan importante escultura, que terminaría de darle ese “toque” icónico a su obra.
Alfredo Ahuja quería que la modelo fuera una persona oriunda de Tuxtepec y con arraigos en la zona, no solamente estéticamente bonita sino que representara la identidad de todas las Cuenqueñas.
El porte y la belleza sin igual de Lidia Medina Bautista, la hicieron idónea para ser la modelo; ella había sido señorita Oaxaca en 1995, además su estatura era ideal pues mide 1 metro con 68 centímetros.
Ella hacía su servicio social en el área de gestión y desarrollo del palacio, cuando Alfredo Ahuja mandó llamarla ¡Quiero que tú seas la modelo de una escultura que será representativa para Tuxtepec! Exclamó el entonces Presidente Municipal.
¿QUIÉN ESCOGIÓ A LA MODELO?
“Ese fui directamente yo, yo dije si va a ser una muchacha Tuxtepecana, la que va a posar para la escultura, voy a ver las fotos de la última delegación flor de piña, ahí estaba Lidia, ella participó, y me parecía que tenía las características de la mujer Tuxtepecana, fue por esa razón y por estatura y varios elementos que nos decidimos que fuera ella, pero fui yo quien la escogió” dijo el ex Presidente Municipal.
Lidia posó una semana con sesiones de 3 a 4 horas diarias para el escultor Tapatío Rubén Hernández Guerrero.
No se podía mover, ya que el diseño de la escultura fue por partes: primero la cara, después el cuerpo, luego los detalles del huipil de San Felipe Usila, hasta los huaraches y accesorios.
El día de la inauguración estuvo presente la maestra Paulina Solís Ocampo, creadora del baile “Flor De Piña”, de hecho ella dio el visto bueno para la escultura, comentó Lidia Medina.
“En ese tiempo no nos maquillábamos mucho, íbamos más naturales del rostro” declaró la modelo.
La escultura originalmente fue de bronce hasta que se pintó en la administración de Diego Pacheco.
“Flor de Piña es un baile muy distintivo en Oaxaca, nunca se había visto un monumento que distinguiera a Tuxtepec, me siento orgullosa de ser la modelo, pero jamás pensé que cobraría tal relevancia” dijo Lidia Medina Bautista.
Quien al ser cuestionada por si debe ser remodelada la escultura o ser cambiada, respondió “los monumentos que ya están no se deben quitar por el presidente municipal en turno, sino darles mantenimiento, sobre todo porque es una escultura icónica e histórica de la Ciudad, la decisión la debe tomar el pueblo”.