cebollas encurtidas
Las cebollas encurtidas, curtidas o en escabeche, a gusto de cada comensal, son una delicia. El diccionario Larousse de Cocina las define como “preparación elaborada con cebollas que se cuecen brevemente en vinagre con clavo, pimienta entera, orégano y ajo. Se guardan en un frasco por tiempo indefinido, para ser usadas después”. La misma obra de consulta menciona que pueden ser curtidas al ser “pasadas por agua hirviendo para que se desflemen y luego marinadas en jugo de naranja agria con sal”.
Pueden disfrutarse solas, como complemento de algún otro encurtido, como guarnición, o ser usadas para realzar el sabor de otros platos. Su preparación es bastante sencilla; sin embargo, requiere de un poco de paciencia, pues es necesario dejarlas reposar por un tiempo antes de consumirlas. Al momento de encurtir, puede emplearse cualquier tipo de cebolla. Las cebollas morada, dorada, blanca y chalota suelen encurtirse cortadas en ruedas o en cubos pequeños. En el caso de las tipo perla se utilizan enteras.
Receta cebollas encurtidas
Método 1
Ingredientes
2 cucharadas de aceite
El jugo de cuatro limones grandes
4 cebollas grandes
2 cucharadas de sal
Preparación
Tomar las cebollas y cortarlas en ruedas o tipo pluma.
Poner las cebollas cortadas en un bol y esparcir sobre ellas la sal y la mitad del jugo de limón. Dejar reposar cerca de diez minutos.
Transcurrido el tiempo, pasar las cebollas por agua caliente para desflemar o quitar el sabor fuerte. Dejar reposar un par de minutos más.
Pasado el tiempo, escurrir las cebollas y lavarlas para quitar el exceso de sal.
Colocar las cebollas en un recipiente de vidrio con tapa e incorporar el resto del jugo de limón, el aceite y ajustar la sal, de ser necesario.
Tapar y dejar reposar en la nevera, mínimo tres horas.
Método 2
Ingredientes
½ cucharadita de sal
5 cebollas moradas
½ taza de agua hirviendo
200 ml de vinagre blanco
100 g de azúcar
Preparación
Cortar las cebollas en tiras finas y pasarlas unos minutos por el agua hirviendo.
Escurrir el agua caliente y ponerlas en agua fría para detener la cocción.
En una olla, poner el vinagre, el azúcar y la sal. Cocinar hasta punto de ebullición, pero sin que llegue a hervir.
Dejar reposar hasta que esté a temperatura ambiente.
Una vez frío, poner las cebollas en un recipiente de vidrio junto con la marinada.
Permitir que reposen mínimo tres horas antes de disfrutar.
Receta: El gran Chef
Con información de cocinayvino.com/ Lorena Centeno