•Reporteros presos en 1812
Luis Velázquez/ Malecón del Paseo
Veracruz.- EMBARCADERO: Toda la vida, en todos los tiempos, ha existido una lucha sórdida y siniestra entre los políticos y los medios… Mejor dicho, de los políticos contra la prensa para imponer su agenda pública, con un tiradero de incienso… Según la historia, la palabra escrita siempre ha sido más peligrosa que una R-15… La R-15, por ejemplo, quita la vida con un rafagueo… Pero las letras van, digamos, matando poco a poco como el cáncer y la presión arterial y el VIH…
ROMPEOLAS: En el mes de noviembre de 1810, estallada la guerra de Independencia con Miguel Hidalgo, el virrey Venegas recibió la orden de los reyes españoles de establecer la libertad de prensa en México… Pero “por sus pistolas”, el virrey la aplicó hasta el mes de septiembre del año 1812, porque entonces tenía en la mira a un par de articulistas… Uno, Carlos María Bustamante, quien publicaba en el periódico “El juguetillo”, y el otro, José Joaquín Fernández de Lizardi, en “El Pensador Mexicano”… Los dos criticaban al sistema político de entonces…
ASTILLEROS: El virrey Venegas desató su furia en contra de ellos, pues tenía, como todos los políticos en el mundo, “la piel muy suave” y unas palabras publicadas en la prensa lo enfurecían… Lizardi fue encarcelado y Carlos María Bustamante anduvo “a caza de mata” y se volvió un prófugo de la justicia… Neutralizados los dos para el ejercicio crítico de la prensa, el virrey publicitó la libertad de prensa en su reino…
ESCOLLERAS: La misma historia se ha repetido siempre… Por ejemplo, Porfirio Díaz Mori encarceló 41 veces a Ricardo Flores Magón y 36 veces a Filomeno Mata y nunca pudo con ellos… Incluso, Porfirio Díaz ofreció un cargo público a Flores Magón y lo rechazó… Claro, mucho antes de Flores Magón y Filomeno Mata se metieran en el periodismo, el par eran políticos y activistas sociales… Y abrazaron el periodismo porque miraron el periódico como instrumento de lucha contra el dictador… Fue al revés, por ejemplo, con el caso de algunos periodistas en el tiempo de Benito Juárez… Ignacio Ramírez, Ignacio Manuel Altamirano y Guillermo Prieto, entre otros, pasaron del periodismo a la política y cuando Juárez cayó en la reelección (quince años en el poder público) le renunciaron y regresaron al periodismo con un gran sentido crítico…
PLAZOLETA: Encerrado en el Palacio Federal donde vivía con su esposa y sus tres hijas y sus tres yernos a quienes impusiera en cargos públicos, Benito Juárez “dejó hacer y dejó pasar” el periodismo crítico… También, Francisco Ignacio Madero “cerró la llave” a la prensa y “los dejó hacer” sin perseguir ni reprimir a nadie, aun cuando victoriano Huerta y Félix Díaz, el jefe policiaco de la ciudad de México, sobrino del dictador, se aliaron con el embajador de Estados Unidos en México para derrocarlo…
PALMERAS: Miguel Hidalgo y José María Morelos nunca tuvieron prensa… El virrey controlaba a los medios… Incluso, el virrey decretó su famosa ley de “Sangre y fuego” para ajusticiar a los clérigos rebeldes… Por eso, Hidalgo y Morelos fueron fusilados con el visto bueno de la llamada Santa Inquisición… Tiempo cuando las elites de la iglesia, aliadas con las elites políticas, eran dueñas del dinero público… La iglesia, por ejemplo, además, era prestamista, la versión del Monte de Piedad, prestando dinerito a los jodidos con intereses elevadísimos… Durante diez años, el virrey y la iglesia exhibieron las cabezas decapitadas de Hidalgo, Ignacio Allende, Mariano Abasolo y Juan Aldama en la Alhóndiga de Granaditas…