Redacción El Piñero
Oaxaca, México. – La Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) ha trasladado su “plantón” del Centro Histórico de la capital al acceso al Aeropuerto Internacional de Oaxaca, impidiendo tanto la salida como la entrada de los usuarios. Esta medida ha generado interrupciones significativas en las operaciones y ha dejado a miles de viajeros afectados.
La presencia de los docentes en el acceso al Aeropuerto Internacional de Oaxaca ha generado molestias y complicaciones para los usuarios que dependen de este importante centro de transporte. Los viajeros han enfrentado dificultades para llegar a sus destinos o regresar a sus hogares, lo que ha generado frustración y retrasos significativos.
Al llevar a cabo esta actividad, la Sección 22 del SNTE ha acordado llevar a cabo un paro de 48 horas los días 22 y 23 de este mes. Esta decisión tendrá un impacto directo en la educación de miles de estudiantes en el estado de Oaxaca, quienes se quedarán sin clases durante esos dos días.
Los docentes afiliados a la Sección 22 del SNTE explican que su determinación de continuar con estas movilizaciones se debe a la percepción de que sus peticiones laborales no han sido atendidas. Consideran que las autoridades no han cumplido con los acuerdos previos y, por lo tanto, han decidido intensificar su jornada de lucha, que se desarrollará de “menos a más”.
Las autoridades estatales y educativas se encuentran monitoreando la situación y trabajando en la búsqueda de una solución que permita restablecer la normalidad en el acceso al aeropuerto. Sin embargo, hasta el momento no se han anunciado medidas concretas para abordar esta problemática.
Esta acción de la Sección 22 del SNTE representa un desafío adicional para el gobierno y las instituciones educativas, que buscan garantizar la continuidad del aprendizaje de los estudiantes. Se espera que las partes involucradas puedan entablar un diálogo constructivo y encontrar soluciones que permitan resolver los problemas laborales de los docentes sin afectar el derecho a la educación de los estudiantes.