Jaime GUERRERO
Oaxaca.-Este viernes, el sacerdote Gerardo Silvestre Hernández, fue sentenciado a 16 años y seis meses de prisión por pederastia clerical, al encontrarlo culpable del delito doloso de corrupción de personas menores de 18 años en su modalidad de inducción a actos sexuales y exposición de filmes pornográficos.
Al confirmar lo anterior, el Fiscal General de Oaxaca, Héctor Joaquín Carrillo Ruiz, expuso que mediante resolución de fecha 22 de febrero y notificada al Agente del Ministerio Público éste viernes, el Juez Mixto de Primera Instancia del Distrito Judicial de Villa Alta, dictó sentencia condenatoria en el expediente 01/2014, en contra del sacerdote.
El juez le impuso una pena de prisión de 16 años con seis meses, una multa de 46 mil 169.60 pesos, y al pago de una reparación del daño de 8 mil 800 pesos, y como pago de la reparación del daño moral de 25 mil pesos.
Carrillo Ruiz, puntualizó que la pena de prisión que empezara a compurgarse a partir del 30 de enero del 2013, fecha en que fue privado de su libertad en atención a la orden de aprehensión librada en su contra.
Cabe señalar que los hechos sucedieron en la población de Villa Alta, Oaxaca, en los meses de marzo y agosto de 2009 y febrero de 2010, en la época en que el hoy sentenciado era el párroco encargado de la Iglesia de San Ildefonso, en donde le permitía a las víctimas la ingesta de bebidas embriagantes, la proyección de filmes e imágenes pornográficas para después realizar actos sexuales.
El cura Silvestre Hernández fue aprehendido el 29 de noviembre de 2013 en Tlaxiaco en cumplimiento a una orden de aprehensión librada por el Juzgado VII de lo Penal, según consta en el expediente penal 140/2013 por el delito de corrupción de personas menores de 18 años.
Posteriormente, el Juzgado Séptimo de lo Penal dictó el auto de formal prisión a Silvestre Hernández, ex párroco de Santa María Ozolotepec, San Pablo Huitzo, Santiago Camotlán y Villa Alta.
Y el pasado el pasado 18 de enero de 2017, el juez mixto de primera instancia del distrito judicial de Villa Alta, concluyó que el sacerdote Silvestre Hernández, es culpable de pederastia clerical, sin embargo, hasta hoy se dio a conocer su sentencia.
Al clérigo se le acusó de abusar sexualmente de dos niños de Villa Alta, hechos que ocurrieron durante los años 2009 y 2010.
Sin embargo, existe la presunción de presunto abuso sexual de casi un centenar de niños indígenas, denunciaron integrantes del Foro Oaxaqueño de la Niñez (Foni), quienes insisten en que el Arzobispo de Antequera Oaxaca, José Luis Chávez Botello, ofrezca una disculpa pública y busque la reparación del daño cometido a unas 100 personas que en el 2009 tenían entre 11 y 13 años.