Ciudad de México.- La demolición y remoción de escombros en los inmuebles dañados por el sismo del pasado 19 de septiembre se realizará con un presupuesto de 2 mil 500 millones de pesos que provendrán tanto del Gobierno de la Ciudad de México (GCDMX) como de recursos federales.
El 50% serán aportaciones del Fondo de Desastres Naturales (FONDEN) y el 50% restante saldrá de las arcas del gobierno capitalino.
De esta bolsa tendrán que salir los recursos para la demolición de de inmuebles que, tras una valoración pericial, se determine sufrieron daños estructurales.
De 10 mil 900 inmuebles evaluados por las autoridades capitalinas, en la primera fase de la emergencia, 500 fueron calificados con “código rojo”, incluidas siete escuelas; mil 308 con “código amarillo” y 9 mil 095 con “código verde”.
En “código rojo” están los inmuebles que no son habitables y cuya demolición es urgente; en “amarillo”, aquellos que requieren reparaciones mayores antes de permitirse el regreso de sus inquilinos; y en “verde” los que tienen daño menor.
En el caso de los inmuebles con código rojo, las autoridades capitalinas realizarán una segunda evaluación a las estructuras de estos edificios, por lo que podría darse el caso de que varios de ellos cambien de clasificación.
Recursos del FONDEN no llegan
Hasta la tarde del miércoles 4 de octubre, el gobierno federal no había liberado los recursos del FONDEN para atender la emergencia por el sismo en la CDMX, dijo Miguel Ángel Mancera, jefe de Gobierno, durante una reunión de trabajo con el presidente de México, Enrique Peña Nieto, en la Residencia Oficial de Los Pinos.
Mancera explicó que aun cuando la CDMX ya concluyó el proceso de registro en tiempo y forma para acceder a esos recursos federales, hasta el miércoles seguían “esperando la respuesta” del gobierno federal.
“A veces vuelven muy complicados ciertos trámites que hay que realizar (…) en una situación de emergencia y ahora de urgencia, como lo estamos viviendo todavía, me parece que sería muy benéfico para todos nosotros que (…) obviáramos algunos trámites o flexibilizáramos las reglas de operación para su aplicación”, dijo Mancera.
Las alternativas: créditos e hipotecas
Créditos e hipotecas son las dos alternativas que el GCDMX ha planteado para apoyar a miles de familias que perdieron sus hogares o sufrieron fuertes daños en sus viviendas.
Para las familias cuyos inmuebles serán demolidos el gobierno capitalino propone que puedan acceder a recursos del Fondo de Contingencias de la CDMX y de la Sociedad Hipotecaria Federal, para obtener un esquema de hipoteca a largo plazo, “con condiciones de tasa preferentes”, que les permita comprar una vivienda.
En el caso de los inmuebles calificados con código amarillo, se plantea que su rehabilitación corra a cargo de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios, la Cámara Nacional de Desarrollo y Promoción de la Vivienda (CANADEVI) y de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC). La propuesta es que las familias afectadas puedan tener acceso “a créditos de mejoramiento” de la vivienda a través del Instituto de Vivienda de la Ciudad de México.
Ley para reconstrucción
La Consejería Jurídica y de Servicios Legales (CEJUR) del Gobierno de la CDMX presentó este miércoles, ante la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), el proyecto de decreto por el que se expide la Ley del Programa para la Reconstrucción, Recuperación y Transformación de la CDMX en una ciudad cada vez más resiliente. Se trata de la propuesta de ley que presentó hace unos días Miguel Ángel Mancera como parte de las acciones de emergencia derivadas del sismo.
El diputado y coordinador parlamentario del PRD, Leonel Luna Estrada, aseguró durante la sesión legislativa de este miércoles que la propuesta presentada por Mancera no sólo busca reconstruir la CDMX, sino transformarla a partir tres objetivos específicos, y cada uno con una temporalidad determinada: Atención Inmediata en las primeras seis semanas; Reubicación, reconstrucción y recuperación en seis meses y una transformación de la ciudad capital para los próximos cinco años.
Para el diputado de Morena, David Cervantes, si bien propuesta de Mancera toca puntos importantes para superar la tragedia del sismo, es importante incluir otras iniciativas y recomendaciones que han lanzado organizaciones civiles y su propio partido.
Criticó que en este momento de la emergencia no exista un diagnóstico que permita conocer realmente la dimensión del problema e identificar las prioridades, pero también el hecho de que las autoridades capitalinas no tengan claro en qué fase de la emergencia se encuentran.
“Se está trabajando en temas que no son parte de esta fase, mientras que cosas que tendrían que estar haciendo en este momento, como el diagnóstico, no lo han hecho. Si no se elabora un adecuado diagnóstico en esta fase, el programa de reconstrucción va a tener fallas”, dijo Cervantes, cuyo partido presentó una iniciativa, diferente a la de Mancera, donde piden un fondo inicial de 35 mil millones de pesos para la reconstrucción de la ciudad.
En su iniciativa, los legisladores de Morena también piden eliminar los seguros de gastos médicos para los tres órganos de gobierno, reducir en 20% el sueldo de diputados, magistrados y secretarios de gobierno y disminuir al 50% el presupuesto de la ALDF. También pidieron destinar el 10% del presupuesto de 2018 y la implementación de un programa integral de vivienda que incluya su reparación, reconstrucción o reposición.
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