El funcionario boliviano, Arturo Murillo, expresó sus condolencias a los familiares que de las personas que han muerto en las manifestaciones y enfrentamientos que se dieron a partir de la renuncia de Evo Morales. Asimismo, aseguró que el Gobierno no va a “descansar hasta darle total tranquilidad a la población”.
EFE
La Paz (EFE).- El Ministro boliviano interino de Gobierno, Arturo Murillo, dijo este sábado desde la ciudad de Cochabamba que ha pedido a la Fiscalía una investigación “transparente” sobre cómo ocurrieron las muertes de nueve personas en los fuertes enfrentamientos con las fuerzas conjuntas.
En una rueda de prensa desde la sede de la Policía Boliviana en Cochabamba, Murillo expresó sus “condolencias” a las familias que han perdido a sus seres queridos y que el Gobierno interino no va “descansar hasta darle total tranquilidad a la población”.
Señaló que se le ha pedido a la Fiscalía General que “sea absolutamente transparente” la investigación sobre las muertes registradas en los enfrentamientos, en los que según denunció “hay una mente macabra que está detrás”.
Murillo le dijo a la población de Cochabamba que “si hay fallecidos ¿por qué esconderlos? Tenemos reportes de que tres de los fallecidos tienen disparos en la nuca. Aquí hay una mente macabra que está detrás”.
El defensor de Pueblo en Cochabamba, Nelsón Cox, confirmó a Efe que las víctimas mortales en esa región subieron a nueve, los heridos son 115, de los cuales uno está muy grave.
Los cocaleros del trópico de Cochabamba (centro), bastión sindical y político de Evo Morales, protestan contra el Gobierno interino encabezado por Jeanine Áñez, que asumió tras la renuncia de Morales.
Por otro lado, el Ministro Murillo también negó que se esté haciendo “cacería a extranjeros”, en referencia a las recientes detenciones de ciudadanos venezolanos y cubanos acusados presuntamente de financiar y apoyar las marchas contra el Gobierno de transición.
Este viernes la Canciller interina, Karen Longaric, dijo que habló con su homólogo de Cuba, Bruno Rodríguez, quien le confirmó que para “no exasperar más la situación y no dañar la relación”, habían decidido “retirar de Bolivia a 725 cubanos que trabajan en diferentes áreas de la cooperación”.
En ese sentido, Murillo confirmó que este mismo sábado se reunió con el embajador cubano, quien le dijo “que tiene 18 médicos en Chapare que no sabe cómo evacuarlos y teme por sus vidas”, por lo que se dispuso un operativo de evacuación de esos ciudadanos en un helicóptero que serán llevados a la ciudad de Santa Cruz.
Este sábado desde esa ciudad salió de Bolivia un grupo de 226 médicos cubanos desde el aeropuerto Viru Viru rumbo a Cuba.
Sobre la prensa, Murillo pidió “respeto” al “fuerte trabajo” de los periodistas y comunicadores, al tiempo que señaló que “hay medios de comunicación que están haciendo sedición (…) se les ha pedido que no desinformen”, que “por favor le cuenten la verdad al pueblo”.
Grupos de productores de coca bolivianos afines a Evo Morales, quien renunció el pasado domingo a la Presidencia, se enfrentaron este viernes al Ejército y la Policía por segundo día, en su intento por ingresar a la ciudad de Cochabamba, donde prácticamente se libra una batalla.
Los manifestantes usaron cargas de dinamita al tiempo que la Policía y las Fuerzas Armadas intentaron dispersarlos con gases lacrimógenos.
Las protestas en Bolivia ya dejan 22 muertos y más de 500 heridos en enfrentamientos desde las elecciones del 20 de octubre, en las que Evo Morales fue reelegido para un cuarto mandato consecutivo, entre denuncias de fraude.
Una auditoría de la Organización de Estados Americanos (OEA) señaló “graves irregularidades” y pidió repetir las elecciones, tras lo cual Morales anunció el pasado domingo su renuncia a la Presidencia y viajó el lunes a México, en calidad de asilado.