• Acusó que el promedio de permanencia de los fiscales locales es de ocho años y que en algunos casos están por más tiempo: “El de Guanajuato lleva 14 y le faltan dos. Entonces, se les pasó la mano, o sea, es mucho”.
CIUDAD DE MÉXICO (apro).– El presidente Andrés Manuel López Obrador consideró que la permanencia de los fiscales estatales por un largo tiempo, por ejemplo 12 años, es garantía de impunidad y que, por dignidad, quienes no ofrecen resultados deben presentar su renuncia.
Rechazó que su administración plantee una reforma al respecto y resaltó que deben ser las autoridades locales las que resuelvan la situación.
“Y tener un poco de vergüenza porque, si ya llevan seis años y no hay buenos resultados, pues hay que tener dignidad y decir: ‘Ahí está mi renuncia, ya me voy’”, dijo el presidente, y expuso el ejemplo de la revocación de mandato: “A los tres años preguntarle a la gente: ‘¿Quieres que siga o que se vaya?’ No porque ya me eligieron por seis años, haga lo que haga, me tienen que aguantar. Es realmente un absurdo”.
En su conferencia en Tamaulipas, acusó que el promedio de permanencia de los fiscales locales es de ocho años y que en algunos casos están por más tiempo: “El de Guanajuato lleva 14 y le faltan dos. Entonces, se les pasó la mano, o sea, es mucho”.
Insistió en que “los mismos procuradores, si no hay resultados, deberían de renunciar, de salirse, pero ahí están aferrados, y lo peor es que algunos hasta cometen delitos o se asocian; como dirían en mi estado, se amacollan con la delincuencia”.
El presidente reprochó que si no hay buenos resultados no puede haber impunidad, además de que nadie puede ser ni sentirse absoluto en ningún nivel.
“Hay veces que está muy mal la situación de seguridad en un estado, sale el fiscal o procurador y las cosas mejoran, y se puede probar. El caso de Veracruz, estaba mal, mal, mal, estado vecino de aquí, de Tamaulipas; salió el procurador, desde luego hubo otros cambios, pero es notorio que mejoró la situación de seguridad”, señaló.
El mandatario federal habló también del nombramiento de los fiscales anticorrupción que, en su mayoría, fueron elegidos por gobernadores para permanecer aún después de su salida y aprovechó para señalar otra práctica que se da en las entidades.
“Es como la otra práctica que hay que desterrar, de que salen los gobernadores y reparten como 10, 15, 20 notarías a sus amigos, a quienes les ayudaron; eso también tiene que desaparecer, todas esas prácticas completamente deshonestas”, indicó.
Nota de PROCESO