- Incertidumbre y zozobra
- Malandros imponen su ley
Barandal
Luis Velázquez
Veracruz.- ESCALERAS: La vida diaria en Veracruz, en medio de la incertidumbre y la zozobra. Los días, prendidos con alfileres. El gran pendiente social número uno, la inseguridad, en el tobogán. Los malandros siguen adueñados de la agenda pública. Ellos, imponen su ley.
En sólo 72 horas, tres días, por ejemplo, la sicosis del terror y “el miedo al miedo” en su más alta dimensión en la región de Córdoba, a mitad de semana.
En Cuichapa, un taxista secuestrado.
En Huatusco, una persona secuestrada.
En Huatusco, un empresario de 75 años que se ejercitaba en el campo llanero, secuestrado y desaparecido.
En Córdoba, un ejecutado luego de una balacera.
En Córdoba, otro plagiado en el campo deportivo.
Nadie, pues, está a salvo. Nadie puede cantar victoria.
Y en medio del caos, la estadística de la muerte.
Según el gabinete estatal de seguridad, el índice delictivo va a la baja, en caída libre.
Pero según el gabinete nacional de seguridad, los secuestros y homicidios en Veracruz han aumentado en un 130 por ciento en el último año.
Y lo peor, el mes anterior, Veracruz de nuevo repite como puntero en feminicidios, sólo que ahora tiene un competidor y es el Estado de México del priista Alfredo del Maza junior.
PASAMANOS: La prensa diaria se lee y se leen varios medios y en todos connotan el zipizape, el zafarrancho para imponer a Marco Even como Fiscal Anticorrupción.
Fiscal carnal le llamaron los diputados locales de MORENA.
El Fiscal que será impugnado ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación según anunció el gobernador electo.
Ok.
Pero al mismo tiempo, se trata de una feroz y sórdida lucha por el poder político para tener un Fiscal a modo, en tanto se multiplican los secuestros, los desaparecidos, los feminicidios, los asesinatos, los fuegos cruzados, las tirotizas, los asaltos a personas saliendo de los bancos, los atracos al comercio organizado y los asaltos a casas habitación.
Y en el otro lado de la cancha, las ONG de los Solecitos y Colectivos integrados con madres y padres con hijos desaparecidos clamando justicia porque ellos continúan, sin el respaldo oficial, buscando a los suyos.
¡Vaya paradoja del reality-show en el Congreso local!
Estamos a cuatro meses de la transición del gobierno del PAN al de MORENA y la inseguridad quedará como el pendiente gigantesco de la yunicidad, cuando, ha de recordarse, el gobernador Yunes garantizó que en un semestre pacificaría Veracruz y que Fernando Gutiérrez Barrios lograra en 40 días y 40 noches con “La Sonora Matancera” de Agustín Acosta Lagunes.
Ahora, el góber electo amplía el periodo y habla de dos años, es decir, veinticuatro meses, o sea, 3 semestres más que Miguel Ángel Yunes Linares.
La historia, sin embargo, es categórica y demuestra que nunca ha existido un tiempo concreto y específico para.
Por ejemplo, Felipe Calderón Hinojosa tuvo 6 años para pacificar el país, y nunca lo alcanzó y por el contrario, dejó doscientos mil muertos.
Enrique Peña Nieto ya casi completa los seis años y lleva 120 mil muertos.
Y ni modo, entonces, que el góber electo de Veracruz tenga “una varita mágica” para restituir el paraíso terrenal perdido en la tierra jarocha.
CORREDORES: La yunicidad sostiene reuniones semanales para evaluar el avance en el combate a la inseguridad, en tanto AMLO ha anunciado que lo hará, pero todos los días, a las 6 de la mañana.
Pero en el caso de Veracruz, los malandros siguen marcando la agenda pública un día sí y el siguiente también, y entonces, la secretaría de Seguridad Pública y la Fiscalía van atrás de ellos con una política reactiva.
Y ellos, por añadidura, siguen gobernando.
Han detenido a equis número de bandas delictivas, pero al mismo tiempo, aparecen nuevos jefes en automático, pues se trata de células bien organizadas.
Y si el narcotráfico entró en Veracruz en el sexenio de Patricio Chirinos Calero, 1992/1998, con José Albino Quintero Meraz, ex convicto del penal de Almoloya, ahora está encarnado en unos 7 carteles según la Procuraduría General de la República.
Y ellos, todo indica, van por delante.
Habría, entonces, digamos como ejercicio, cuantificar el número de muertos, secuestrados y desaparecidos en los últimos veinte meses para calibrar el daño social a los 8 millones de habitantes.
BALAUSTRES: Habrá siempre de reconocerse la terquedad del gobernador Yunes para seguir haciendo justicia con los políticos acusados de pillos y ladrones, algunos presos en el penal de Pacho Viejo.
Habrá, por ejemplo, de considerarse la exposición pictórica en Xalapa inaugurada el jueves 26 integrada con pinturas embargadas a Javier Duarte, entre ellas de famosos, y que ahora, se afirma, formarán parte del patrimonio estatal.
Pero en materia de inseguridad, que era y es aún el más grave reclamo social, el avance ha sido mínimo, si se considera que los carteles suelen desplazarse de un territorio geográfico a otro para sembrar el terror y el horror.
Lo intentaron, digamos, pero fallaron. También fracasaron Javier Duarte, Enrique Peña Nieto y Felipe Calderón.
Claro, y en el caso manifiesto de Duarte, hasta se aliaron con ellos para la desaparición forzada.