• Trabajaba en el ejército cuándo la volcadura de un Jeep hizo que perdiera la movilidad en las piernas.
Carlos Abad/El Piñero
Hace 29 años, cuando Manuel Alejandro Carballo Ortíz, entonces miembro del ejército Mexicano tenía dieciocho, sufrió un accidente en un Jeep, que le cambió la vida para siempre; tras quedar parapléjico no se dió por vencido y comenzó la lucha por salir adelante, luego de dos trabajos, decidió adaptar una motocicleta para auto emplearse y hoy en día, a los 47 años de edad, es el motomandados más confiable y popular de Tuxtepec, en la región de la cuenca del Papaloapan, en el norte de Oaxaca.
La fractura en la columna vertebral, específicamente en la zona T12L1, le provocó que perdiera la movilidad en ambas piernas, pero él no se dió por vencido a pesar de causar baja en las fuerzas castrenses; así fué como de la capital del país regresó a su natal Tuxtepec, dónde primero estudió computación, más tarde puso una cremería, luego ingresó a la preparatoria y finalmente consiguió empleo en atención a clientes y contratación de equipo para el sistema Sky.
Fué ahí cuando los problemas de movilidad, entre los que destacan la falta de rampas, el exceso de ambulantes y otros objetos que estorban en la vía pública, lo forzaron a adaptar una motocicleta, y para ello copió un modelo Brasileño que vio en televisión “lamentablemente aquí en la ciudad de Tuxtepec es muy complicado moverse en taxi, en una ocasión alguien me llevó a cierto lugar y llegando ahí, la tarifa en ese entonces era de 23 pesos, y me cobró 35 , y le pregunto yo ¿Por qué? Porque bajarme por tu silla y ponértela es un trabajo que no debo hacer yo” le respondió el ruletero.
Otra mala anécdota que Manuel Alejandro contó al Piñero periodismo y debate en relación al servicio de taxis es que “en temporada de lluvia no sé paraban para poder subir mi silla, por cuestiones de mojarse, o el clásico ¿Viene alguien que te acompañe para que te ayude?
Aunque al principio su proyecto de movilidad se efectuó al estilo “acierto y error”, ya que nadie quería adaptarle su silla de ruedas a la motocicleta automática, y los pocos que aceptaban el trabajo pretendían cobrar precios elevados, hasta que llegó alguien que se dispuso a ayudarlo y así cambió su vehículo de trabajo a un motor estándar o de velocidades/con cadena.
¿CÓMO NACIÓ SU EMPRENDIMIENTO?
Fué entonces cuando nació su emprendimiento que lo llevó al éxito “moto servicios Alex Quickie” con el eslogan “lo hace por tí”, a lo que relató “Quickie en inglés significa rapidito, yo intentaba llamar la atención un poquito en ese sentido y de hecho lo hizo, la gente de alguna manera como que se identificó con ese Quickie y me empezaron a llamar Kike”.
Actualmente el servicio de motomandados lleva 4 años y medio con un éxito total, debido a la empatía, rapidez, honradez, confiabilidad y eficacia; es así como de lunes a viernes recorre de treinta a cincuenta kilómetros diarios, de 8 de la mañana a 9 de la noche por las calles de Tuxtepec, y así como se abrió paso en la vida, lo hace en la vía pública: entre trailers, urbanos, camiones pesados, motocicletas, puestos ambulantes, porque para él no hay obstáculo que le impida ganarse la vida honestamente.
Y es que acuerdo a una de sus clientas Elvira Hernández López, su servicio es el más recomendado “me impresionó su forma de trabajar, desde entonces Kike es parte de mi familia (…) Primeramente honesto, yo creo honesto, yo no le veo limitaciones, ósea yo llamo a kike cómo cuál quier otro, para mí tengo como a 3 mandaditos y lo escojo a él porque es honesto, sabe escoger cosas de calidad, porque eso es bien importante cuando lo mandas por tus verduras, sabe escoger las manzanas, todo ósea para mí eso es un punto clave, sabe mis gustos, ya conoce mis gustos, y te voy a decir que en mis ventas de mole y nanche es mi patrocinador oficial, en lugar de 30 pesos nos cobraba 20 pesos, entonces siempre trabajamos con él”.
Además bien dicen que “detrás de un hombre, siempre hay una gran mujer” y tal es el caso de su pareja desde hace 19 años, Iseell Aurely Huantes Ramos, quién ha sido parte de fundamental de la lucha contra quienes no respetan los espacios destinados a personas con discapacidad “lo que siempre va a sufrir el mundo entero, de que la gente pueda aceptar o respetar los espacios, siempre que obstruyen sus lugares me enojo, me molesta mucho, he llegado a decirle a la gente que si quieren que les baje su silla y nada más se me quedan viendo, porque son lugares de discapacitados, y eso es algo que vamos a luchar siempre, que la gente respete los accesos para las personas con discapacidad”.
Finamente Rosa Isela Ñeco Vanvollenhoven puntualizó la capacidad que tiene Manuel para resolver problemas y encontrar a toda costa, los productos encomendados; por eso y más, Alejandro Carballo Ortíz es punto de referencia, de ímpetu, de ganas de salir adelante, liderazgo y de un servicio de calidad.