Santa Lucía, Estado de México.- “Es una historia triste”, dice el doctor en Antropología y director del Proyecto de Salvamento Arqueológico en Santa Lucía Rubén Manzanilla López al referirse a uno de los más grandes e importantes hallazgos arqueológicos que existen a la fecha en el mundo.
Se trata del enorme yacimiento de restos de mamuts que se encontró en los terrenos donde se está construyendo el nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, dentro de la Base Aérea Militar de Santa Lucía, una antigua hacienda fundada por el jesuita Pedro Sánchez en 1576. Decenas de miles de años antes fue el lago Xaltocan.
Hasta la fecha se han encontrado 234 puntos de hallazgo paleontológico y se han recuperado 11.000 fragmentos óseos. Aún hay excavaciones programadas incluidas dentro de las obras de construcción del aeropuerto, por lo que se podrían encontrar nuevos hallazgos.
“Es una historia triste”, dijo el doctor en Antropología al explicar por qué es Santa Lucía uno de los más grandes yacimientos de mamuts del mundo.
“Decía que es una historia triste porque el lago tenía esa tierra que se ve ahí, y eso cuando se humedece se vuelve fango, se vuelve pantano, y los animales de gran tamaño, de gran peso, quedaban atorados, y pues ya pasando eso, eran víctimas de los carroñeros. Un mamut pesaba alrededor de cuatro toneladas, imagínese, se quedaban atorados y por eso mayoritariamente hay restos de mamuts, pero también se han encontrado de otras especies”, explicó en entrevista con Infobae el director del proyecto de salvamento arqueológico.
Manzanilla López expone que el lago Xaltocan fue, para estos animales gigantes, una trampa mortal.
“Afuera del lago lo que tenían era un espacio muy plano, donde había muchos pastos, era un lugar propicio para la habitación, para la presencia de manadas, había suficiente alimento y había agua dulce; sin embargo, pues no todo era perfecto fuera del lago, estaba muy bonito, pero dentro del lago era una trampa, y era donde caían los animales”.
De acuerdo con el investigador, los restos de mamut que han encontrado hasta ahora datan de un período de 30.000 a 11.000 años atrás, la fecha que postulan es de 10.000 a 11.000 años, aunque explica que pruebas de radiocarbono han arrojado fechas desde hace 29.000 años, pero debido a su antigüedad necesitan ser precisados.
El antropólogo afirma que también se está investigando si hay alguna relación entre la actividad volcánica, que por aquellos años era intensa, con la desaparición de estos animales gigantescos. Los datos que puedan arrojar los estudios de la ceniza podrían poner fecha a uno de los momentos en que murieron los mamuts.
“Ahorita también se está tratando de ver si hay alguna relación, de la muerte de los últimos mamuts, con la actividad volcánica que había aquí en el entorno, aquí caía mucha lluvia de ceniza, no decimos que eso los mató, pero esa ceniza nos podría permitir fechar uno de los momentos en que los animales murieron”.
Una hipótesis sobre la desaparición de la Tierra de estos mamíferos de defensas espectaculares (porque, aclara, lo que comúnmente se conoce como colmillos no lo son, sino que son sus dientes incisivos que se modificaron genéticamente para defenderse y alimentarse); es la de una extinción masiva provocada por cuestiones climáticas.
“La hipótesis ahorita más aceptada sobre la extinción de estos animales es que fueron extinciones masivas provocadas por cuestiones climáticas por falta de alimentos. Al momento de que ya no llovía, los pastos no crecían y los animales no tenían mucha comida, y entonces eso provocó la extensión.
También se ha querido ver que si el hombre tuvo que ver con la extinción de los mamuts por una sobre caza, pero en realidad eran grupos muy pequeños los cazadores, y bueno, pues si lograban matar un mamut o aprovecharse de un mamut que se estaba muriendo; pues eso les daba comida para mucho tiempo, entonces no tenía caso que estuvieran mate y mate animales.
Más que todo, acá también pudo haber sido que cuando los animales se empezaron a quedar sin alimentación, fueron más fácil presa de los carroñeros y de los carnívoros, ya que había tigre dientes de dientes de sable, un lobo que le llaman lobo gigante o lobo terrible y el león americano, entonces esas tres depredadores, pues eran terribles para estos animales”, señaló el doctor en Antropología.
El primer punto en el que encontraron restos de mamut, hace poco más de un año, fue cerca del centro de abastecimiento y se llama M1. Este punto, que visitó Infobae, es un sitio particular porque además de encontrar fémures y defensas de estos enormes animales, incluso de crías de mamut; también se encontraron con el cráneo de un camello, restos de caballo americano, tigre dientes de sable, entre otras especies más pequeñas que compartieron hábitat con los mamuts.
“Mira, por ejemplo, aquí tenemos esta, que es la cadera, por llamarla así, la pelvis de un bebé mamut, pero aquí abajo está la pelvis de otro mamut, de un segundo mamut, serían dos y tenemos una dispersión de costillas, vértebras de los animales, pero no es un solo ejemplar. Por allá también teníamos restos de camello, un cráneo de camello, con huesos de camello, cuidado con donde pisan”, nos pide el doctor debido a que hay huesos por donde se mire.
Los huesos de estos animales se han localizado en tres áreas, una de ellas se corresponde con lo que en el pasado fue la orilla del lago de Xaltocan.
“Lo que hay al fondo es lo que se iba acumulando por arrastre del agua, es muy interesante porque hay un mamut colombino, pero también tenemos camellos, caballos, bisontes, perezoso y evidencia del tigre diente de sable, todos en el mismo lugar, ninguno está como en una posición anatómica porque fue precisamente el arrastre del oleaje del agua, con respecto a esta playa, y más bien fueron arrastrados y los y los mamuts puede que haya muerto aquí por el empanamiento que te comentaba, o en otro lugar y también arrastrados”.
Los huesos de mamut y de las demás especies que han encontrado, están en proceso de documentación, consolidación y análisis . Este trabajo de extracción, muy delicado, está siendo efectuado por un grupo de 43 arqueólogos y restauradores dirigidos por Rubén Manzanilla López, y su estudio permitirá conocer diversos aspectos relacionados con las migraciones, la dieta y las patologías de estos grandes mamíferos.
El doctor Manzanilla explica que paralelamente al proyecto de salvamento de los retos, se está llevando a cabo otro que es de investigación se llama Paleoambiente y Prehistoria del Noreste de México, con la participación de dos paleontólogos, una vulcanóloga, un experto en ADN antiguo, un experto en residuos alimenticios y uno más en química molecular.
“Entonces están haciendo ahorita por ejemplo los estudios para saber la verdadera antigüedad de los restos, a través de muestras de radiocarbono que se están tomando para enviarlas al laboratorio, se está haciendo ahorita la toma de muestras para química molecular, estamos hablando de manadas, que se puedan rastrear en rutas de migración, digamos desde Norteamérica hasta acá, si resultan emparentados se puede seguir una línea de migración.
También se está haciendo ahorita el estudio de toma de muestra de lo que se conoce como ácidos grasos, el contenido estomacal que tenían los mamuts cuando se murieron, se están haciendo estudios de los suelos para saber el tipo de suelos que había, de polen, para saber la vegetación”, abunda el antropólogo.
Por su parte, el capitán primero ingeniero constructor Jesús Cantoral Herrera, jefe de la Mesa de Salvamento Arqueológico y Paleontológico por el Proyecto de Construcción del Aire, comenta que desde que empezaron con las obras del Aeropuerto de Santa Lucía se encontraron con restos de mamut.
“Hasta este momento se han contabilizado 234 puntos de hallazgo paleontológico en la superficie que abarca el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, estos hallazgos se empezaron a realizar a partir del 5 de noviembre del 2019 y se han continuado realizando, debido a que se mantiene una estrecha supervisión a los trabajos de excavación que se realizan.
Durante los trabajos de supervisión arqueológica, aquí se tiene una estrecha colaboración en campo, que implica el hacer una supervisión a cada una de las excavaciones y cada una es acompañada por un arqueólogo, supervisor y ayudantes de supervisión, que están al tanto de cada uno de los de los trabajos para que en el momento en que se localizan los restos óseos quede restringida el área y se garantice que no son dañados, afectados los huesos que se encuentran en el lugar”, indicó.
El capitán Cantoral Herrera dice que no es una sorpresa que se hayan encontrado con restos de mamuts durante la construcción del aeropuerto Felipe Ángeles, pues desde la década de los 70 ya se habían localizado hallazgos en la zona, lo que sí es sorprendente, es la cantidad de restos óseos que han encontrado.
“La gran sorpresa ha sido la cantidad, no nos esperamos que pudieran ser tantos… se trata de un de un gran depósito, un yacimiento paleontológico que no está limitado únicamente a Santa Lucía, estamos teniendo este hallazgo gracias a la construcción del aeropuerto, ya que a la ley mexicana obliga a todos los escalones del gobierno a contar con la presencia de un arqueólogo, un antropólogo que realice el salvamento de cualquier hallazgo, sin embargo, aquí han reportado los trabajadores, en lo que son de las inmediaciones, que en las colonias que ellos habitan han encontrado también restos óseos , o sea que se trata de un yacimiento que no se limita Santa Lucía sino que se extiende a las colonias a los poblados aledaños”, explica el capitán.
Hasta ahora se han encontrado unos 200 mamuts además de restos de otros animales, y todo apunta a que este sitio es el que concentra más huesos de mamut del mundo, superando al de Hot Springs, en Dakota del Sur, o a los de Siberia y los pozos de alquitrán de La Brea, en Los Ángeles. Por tal motivo, se está construyendo el Museo del Mamut, que resguardará todos estos hallazgos y contará con salas en donde se recrearán el hábitat de estos enormes animales, así como de las excavaciones.
“El Museo del Mamut, que ahorita ya se está trabajando, tenemos una mesa de trabajo conjunta entre el Instituto Nacional de Antropología e Historia y la secretaría de la Defensa Nacional, para el desarrollo de este museo:; hasta ahorita se tiene contemplado cinco salas de exposición con diferentes temas, que van desde el origen de evolución anatómica y características, posibles causas de la extinción de estos animales y otras especies, animales del pleistoceno tardío que habitaron en Santa Lucía, vamos a tener un jardín temático, vamos a tener una reproducción de excavaciones y se va hacer uso de tecnologías de última generación, como realidad virtual y realidad aumentada.
El museo está proyectado para el primer trimestre del próximo año, ahorita ya está en construcción y forma parte de un corredor cultural que va a estar dentro de las instalaciones del aeropuerto, donde va existir un Museo Militar de la Aviación, los vagones históricos de Ferrocarriles Mexicanos y este Museo del Mamut”, afirmó.
Además del museo se construirá un Centro de Investigación de cerca de 2.400 metros cuadrados, en donde se estudiarán todos estos hallazgos, lo cual arrojará información muy valiosa para poder saber por qué se extinguieron estos espectaculares animales, así como reconstruir parte de la historia de México, considera el antropólogo Manzanilla López. “Tenemos la oportunidad de presentarle al público toda una información sobre cómo era este lugar, cómo era esta zona de la cuenca de México hace unos entre 14 y 10.000 años de antigüedad, qué tipo de clima tenía, qué tipo de vegetación tenía, qué animales llegaban a esta zona, abonar un poco a la historia de cuáles eran las causas de extinción de este tipo de fauna tan grande, pero también reconstruir una parte de la historia de nuestro país, que es muy importante”, concluyó.
Investigación y Fotografías de Infobae