Xalapa, Veracruz. (apro).- La operación de las mafias del crimen organizado, tráfico de drogas y robo de combustibles, así como las ejecuciones y la desaparición de personas, persisten desde el gobierno del priista Javier Duarte como en el del panista Miguel Ángel Yunes Linares, consideró el sacerdote de la Pastoral de Movilidad Humana y defensor de derechos humanos Alejandro Solalinde.
En rueda de prensa, previo a una charla privada con estudiantes de la Universidad de las Naciones, Solalinde Guerra insistió en que Veracruz es una “máquina de desaparecer personas” y de altos índices delictivos.
El sacerdote reiteró que sus denuncias públicas sobre lo que sucede en Veracruz, Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Tamaulipas y otros estados originó que fuera convocado por el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.
Solalinde asistió a dicha reunión porque creyó que Osorio Chong quería datos y pruebas de primera mano de sus dichos, sin embargo, el secretario de Gobernación únicamente le ofreció dinero.
“Lo rechacé, el secretario se molestó porque no quise su ofrecimiento, y desde ahí ya no me habla”, reveló.
Alejandro Solalinde fustigó que en el caso de Veracruz la situación sigue igual con asesinatos, desapariciones, violencia y muerte de periodistas.
“Lo cual indica que no se ve un cambio cualitativo de los dos gobiernos anteriores (el de Fidel Herrera y el de Javier Duarte) a éste (de Yunes Linares).
El padre puso de ejemplo que, en el sur de la entidad, principalmente en Coatzacoalcos continúan los secuestros de migrantes centroamericanos, para ser extorsionados y que desde Estados Unidos sus parientes les depositen fuertes cantidades de dinero.
Y mientras, el Estado en algunos casos es pasivo, en otros indiferente y en muchos casos partícipe de estos crímenes.
“Las mafias se están recomponiendo y aunado al crimen organizado está el crimen autorizado, pues hay mucha implicación de agentes del Estado en el crimen organizado, es demasiado negocio”, alertó.
Alejandro Solalinde señaló que ya valora acompañar a los colectivos de familiares desaparecidos en la reciente exhumación de una nueva fosa clandestina en Atzacan, en la zona centro de Veracruz.
Luego insistió en investigar a funcionarios de alto nivel en los sexenios de Duarte y Herrera, empezando por los propios exmandatarios.
“Tenemos muchísimos testimonios, pero nunca nos han hecho caso, hemos interpuesto cientos de denuncias y no prosperó nada”, acusó.
con información de Por Noé Zavaleta/ proceso.com.mx