Redacción El Piñero
Loma Bonita, Oaxaca. – La próxima administración tendrá varios retos por enfrentar en Loma Bonita -que en el gobierno que fenece no se pudieron atender- y así mejorar la calidad de vida de quienes residen en este municipio Piñero.
En la cabecera municipal, los principales pendientes serán: la rehabilitación de calles, lo que también implica el cambio de tuberías de agua y drenaje que, de acuerdo a las autoridades actuales, ya no son óptimas, pues su tiempo de vida terminó.
Otros puntos de la ciudad presentan socavones, daño evidente en alcantarillas, muchas de ellas que en los últimos años se abandonaron y que, en muchas de ellas, hasta se colocaron avisos como “obra en rehabilitación” u “hombres trabajando” y que nunca se atendieron.
Igualmente, habrá que atenderse en lo inmediato las tuberías de agua potable y los pozos en virtud de que las fugas, hoy manifestas a cada momento, se huelen pestilentes y se observan sucias, mismas que son, obligadamente, utilizadas por la población.
Dentro de la obra pública también está en la lista la colocación de lámparas en distintos puntos de la ciudad, ya que hay calles que permanecen oscuras, siendo una invitación a delinquir, y que lamentablemente, al cierre de año, ya no se atendieron.
Los semáforos también necesitan mantenimiento, ya que hasta una ligera lluvia evidencia su deterioro al prenderse y apagarse, poniendo a la población automovilista y peatonal en evidente riesgo.
Dentro del casco urbano, también hace falta un plan – que nunca se ha hecho- para la recolección de basura que involucre a empleados del Ayuntamiento, recolectores de basura en carretón y sociedad civil, a fin de despejar las calles y evitar el colapso de alcantarillas.
Por otra parte, en el auxilio a la población, se debe seguir trabajando en la capacitación y profesionalización de los cuerpos de auxilio, pues urge que quienes brinden atención inmediata estén certificados y puedan brindar servicios eficientes a la ciudadanía.
Aunado a lo anterior, también, se tendrá que terminar la estación de bomberos, la cual todavía carece de lo más importante: un carro que tenga todos los requerimientos para ser usado durante la época de sequía que es cuando más incendios se registran.
En cuestión de la utilización de los espacios públicos se requiere un plan integral para echar andar los escenarios culturales como el Teatro del Pueblo que -ante presuntas incapacidades y extrañas razones- no ha sido utilizado desde su inauguración.
En tanto, en un tema que afecta a toda la nación, como la inseguridad pública, el próximo gobierno habrá que estrechar alianzas con los órdenes de gobierno estatales y federales en aras de consolidar esfuerzos para abatir la alta taza delictiva que se ha recrudecido con balaceras, asaltos, robos e, incluso, ejecuciones.
Los puntos aquí descritos – que son parte de un sondeo social- tendrán que atenderse en el marco de una nueva normalidad, cuando una amplia población salga a las calles luego de permanecer bajo estrictos cuidados a causa de la COVID 19, y de esta manera establecer objetivos que dinamicen la economía que tanto hace falta en la ciudad de la piña.