Redacción El Piñero
Tuxtepec, Oaxaca.-Entre gritos y reclamos un grupo numeroso de comerciantes sostuvieron su rotundo rechazo al proyecto de remodelación del mercado Flores Magón, y así se lo manifestaron al presidente de Tuxtepec, Irineo Molina, y funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU).
Y es que la noche de este viernes, el munícipe, Irineo Molina Espinoza, hizo un nuevo intento por convencer a locatarios del mercado “Ricardo Flores Magón”, para iniciar la obra de remodelación del mercado que tiene destinado un presupuesto de más de 36 MDP.
Al hacer uso de la palabra, un representante de la SEDATU quedó exhibido ante los cuestionamientos de los locatarios, pues luego de discursar sobre el proyecto y sus beneficios, no pudo responder cuántos años tiene la actual obra del mercado ni de qué material se iba a realizar el techo del nuevo proyecto. Ante esa situación, el funcionario mostró su evidente enojo.
Durante el diálogo, los inconformes señalaron que dicho edificio no requiere demolición solo reparaciones que necesitarían mucho menos presupuesto para solventarse que el destinado, además expresaron que la obra les acarrearía problemas posteriores una vez terminada, aunque sin decir de qué tipo.
Al respecto, en su intervención, Molina Espinoza reconoció que no se había podido tener un diálogo cómodo al precisar “han pasado muchas reuniones y no hemos podido entablar un diálogo así, cómodo, un diálogo en el que pudiésemos analizar cada una de sus inconformidades hasta hace quince días que tuvimos un gran avance”.
Asimismo, dijo que desde su gobierno siempre ha tratado de hacer las cosas en el marco de la Ley, incluso, precisó que convocó a una asamblea para determinar si el proyecto iba o no. Y agregó: “nosotros vamos a seguir insistiendo desde el gobierno porque independiente de esta obra, esta acción, Tuxtepec requiere mucha inversión pública”.
Luego de más de media hora de diálogo y pese a las explicaciones que se volvieron a dar sobre la bondades del proyecto, los comerciantes sostuvieron su negativa y con eso el representante de la SEDATU y Molina Espinoza concluyeron la reunión y se retiraron –molestos– de las instalaciones con el “ya veremos” si se realiza o no; mientras -detrás de ellos- el grupo de locatarios coreaban con insistencia “No al proyecto” y colocaban nuevamente su lona de rechazo a la obra.