Redacción El Piñero
Puebla vivió dos jornadas marcadas por la violencia y la inseguridad. Diversos hechos delictivos sacudieron a la entidad, dejando un saldo de asesinatos, enfrentamientos y protestas en demanda de justicia.
Apuñalamiento mortal en Cuautlancingo
La madrugada del 18 de febrero, una convivencia en la colonia Nuevo León, en Cuautlancingo, terminó en tragedia cuando un hombre de aproximadamente 40 años fue apuñalado tras una riña. Su agresor logró escapar, mientras que los servicios de emergencia confirmaron el deceso en el lugar. Las autoridades ya investigan el móvil del crimen y buscan al responsable.
Protestas en la autopista México-Puebla
El mismo día, un grupo de manifestantes cerró la caseta San Marcos de la autopista México-Puebla en exigencia de justicia para dos menores de edad víctimas de abuso sexual. La protesta generó caos vehicular durante varias horas, mientras los afectados demandaban castigo para los agresores y la intervención de las autoridades.
Balacera en Atencingo deja a un obrero herido
En otro hecho de violencia, Cándido P. U., trabajador del ingenio de Atencingo, fue atacado a balazos al salir de su jornada laboral. El hombre resultó gravemente herido y fue trasladado a un hospital. Hasta el momento, no hay detenidos y se desconoce el motivo del ataque.
Toma clandestina en Palmar de Bravo
La delincuencia organizada también hizo su aparición en la región de Palmar de Bravo, donde se detectó una toma clandestina en un gasoducto de Pemex. La zona fue resguardada por elementos de seguridad para evitar un posible incidente mayor, mientras las autoridades investigan la operación de grupos dedicados al robo de combustible.
Volcadura de tráiler en la autopista México-Puebla
Finalmente, la noche del 18 de febrero, un tráiler volcó en la autopista México-Puebla, a la altura de La María, obstruyendo la vialidad en ambos sentidos. Aunque no se reportaron lesionados, el accidente provocó un fuerte congestionamiento vehicular que se prolongó hasta la mañana del 19 de febrero.
Estos hechos reflejan la creciente ola de violencia y criminalidad en Puebla, donde los ciudadanos exigen mayor seguridad y respuestas concretas por parte de las autoridades. La inseguridad sigue siendo una de las principales preocupaciones de la población, mientras las fuerzas de seguridad intentan contener el crimen en la entidad.