Redacción EL PIÑERO/Alberto Carmona
Cuenca del Papaloapan.- En enero del presente año, el gobernador del estado Miguel Ángel Yunes anunció la inversión de casi 5 mil millones de pesos en obras carreteras para el estado. Sin embargo, en la región de la Cuenca del Papaloapan, las zonas altamente pobres fueron marginadas y sus carreteras se convirtieron en zonas de muerte.
Por ejemplo, la carretera estatal que une a municipios y localidades de la Cuenca Baja quedó totalmente abandonada, sin auxilio ni pizca de desarrollo. Es más, nunca fue transitada por el gobernador durante su bienio y, en sus postrimerías, está a punto de desaparecer en virtud a que fue nunca atendida.
En los últimos días, pobladores y personal de Protección Civil reportaron que dicha carretera, en el tramo Tlacojalpan-Otatitlán, colapsó debido a un deslave provocado por el temporal lluvioso y la fuerte corriente del río Papaloapan que moja su ribera.
Indicaron que hace ocho meses alertaron al Gobierno del Estado y a la CONAGUA la deplorable situación en que se encontraba el asfalto, no obstante, nunca atendió el llamado de auxilio y negó toda asistencia.
Ahora, debido a la emergencia que existe, la carretera a la altura del paraje El Cinco, municipio de Tlacojalpan, fue cerrada a la circulación vial y por lo tanto miles de personas, la gran mayoría campesinos, han tenido que buscar otras alternativas para salir, mientras que muchos otros, han quedado varados en sus propios pueblos.
De continuar las lluvias, precisaron elementos de Protección Civil, el tramo podría desaparecer por completo. Es por ello que, a través de El Piñero de la Cuenca, lanzan la alerta para que residentes de Tlacojalpan y Otatilán (Santuario) eviten la zona y accedan por la localidad de San Isidro, Tlacojalpan, cuya vía se está rehabilitando que pueda soportar el paso vehicular y sea la conexión que sirva ante el escenario de desastre descrito.
Cabe mencionar que la carretera dañada conecta a municipios como Cosamaloapan, Chacaltianguis, Loma Bonita, Tuxtilla, Carlos A. Carrillo, entre otros, y es transitada principalmente por productores que, a diario, laboran en el campo y salen a comercializar sus productos a distintos mercados, tanto regionales como estatales. Y padecen de una carretera que se exhibe totalmente destrozada.